Patio de Comidas y Galería del Zoológico de Chapultepec

Este proyecto conceptualiza la rehabilitación del espacio en directa conexión con su contexto natural. La rehabilitación se tomó como una oportunidad para redimir y resignificar el área de alimentos del Zoológico de Chapultepec. Cada pieza se vincula al desarrollar al máximo el valor constructivo y estructural de una materialidad nueva, convocándose en su integración como un punto icónico en el que las personas que transitan, viven y conviven en el zoológico encuentren siempre el equilibrio entre la recreación social y el respeto al medio ambiente en espacios confortables y modernos. 

El proyecto se compone de un edificio mixto: en planta baja se habilita una nueva explanada para comensales así como un pasillo para la preparación de alimentos con servicios complementarios y de galería. Esto permite una transición más casual entre la zona de preparación y el comedor, misma que invita a las personas a reunirse, socializar y apropiarse del espacio común sin barreras espaciales que se interpongan.

En planta alta se construye una galería abierta con terrazas y elementos que permeabilizan la zona, ofreciendo vistas despejadas, una sensación de continuidad entre el interior y el exterior, un mejor aprovechamiento de la luz y la ventilación natural, y concediendo el uso lúdico de un espacio sin barreras espaciales para fines de curaduría, exposición y apreciación y educación de las exhibiciones que se lleven a cabo, lo cual destaca su rol como un espacio educativo para las nuevas generaciones en cuanto al cuidado del medio ambiente y de la biodiversidad del zoológico. La explanada de comensales, así como el acceso y salida de la galería están resguardados bajo una cubierta de madera laminada mientras que en el pasillo para la preparación de alimentos y servicios, se dispone por una bóveda. 

Esta singular forma define y respeta las huellas y atraviesos de los comensales y visitantes, transformándolos en circulaciones consolidadas y accesibles que conectan puntos de encuentro y habilitan accesos sin perder la relación con el contexto inmediato y el entorno natural. La forma de bóveda permite crear amplios espacios abiertos sin columnas intermedias, facilitando el movimiento y la interacción y creando una atmósfera acogedora con sensaciones de amplitud y confort que desencadenan la vinculación e interacción entre las personas mientras esperan sus alimentos. 

Desde el inicio, se definió un patio de comidas que no fuese una incrustación ajena en el zoológico ni en el bosque de Chapultepec, sino que en su apariencia, lenguaje y conexión con el entorno se volviera parte del lugar, por lo que la elección de la madera laminada como elemento protagónico partió de la necesidad de usar un material fuera parte del bosque. 

Al tratarse de un espacio común y de socialización, tenía que ser un lugar abierto y con sombra para el gozo y recreación de varias personas, por lo que, la cubierta principal, compuesta por un techo de madera laminada con un patrón triangular, se diseñó tomando como modelo la estructura de un panal de abejas como una representación simbólica de comunidad, misma que se logra mediante la alimentación como un acto de convivencia, encuentro y reunión entre la familia y los amigos.  

La cubierta y un panal de abejas empatan en que tienen una estructura organizada, con cada pieza geométrica encajando perfectamente con las demás. Esta estructura es un reflejo de cómo una comunidad puede colaborar y habitar armoniosa y eficientemente en un espacio común.

Así, mediante un sistema constructivo híbrido se reinventa una apariencia innovadora, responsable con el medio ambiente y funcional que manifiesta claramente la intención de generar espacios comunes de disfrute y esparcimiento. 

Video: https://www.youtube.com/watch?v=SKePFgh-Eyc